La Fundación Junto al Barrio fue la encargada de realizar la tercera y última jornada del Laboratorio Juvenil de Reflexión y Participación Ciudadana 2017. Durante la instancia, más de 25 estudiantes tuvieron la oportunidad de reflexionar en torno a los barrios que habitan y generar así propuestas para mejorarlos.

La actividad se llevó a cabo el jueves 31 de agosto en el Museo Nacional Benjamín Vicuña Mackenna y reunió, en un espacio de diálogo e interacción, a escolares del Colegio Altazor de Puente Alto y del Liceo 1 Javiera Carrera. Luego de escuchar la experiencia de la fundación, y a través de un taller práctico, vivieron la experiencia de ser gestores socio-territoriales, donde entregaron ideas y propuestas de cambio a problemáticas que existen en sus entornos. 

El trabajo de los jóvenes fue guiado y asesorado por profesionales de la Fundación Junto al Barrio que, entre otras cosas, centran su trabajo en promover el barrio y el protagonismo de sus vecinos en el desarrollo de ciudades más inclusivas. Sobre su participación en esta jornada de conversación, el sociólogo Jacobo Matheu, gestor territorial de la organización sostuvo que “como fundación no venimos a explicar nada nuevo, los chicos ya saben cómo tienen que hacerlo, los procesos históricos que ellos han vivido estos últimos años les han traído luces y quizás fortalecimiento en esa ideas. Nosotros como fundación, venimos a tomar ese pequeño gran indicador y hacerlo palpable”, concluyó al finalizar la actividad. 

Alejandra Toledo es profesora de Historia y Ciencias Sociales del Colegio Altazor de Puente Alto y destacó esta iniciativa que refuerza los contenidos que actualmente está tratando en sus clases. “Para mí aporta mucho en el concepto de humanizar la ciudad. Muchas veces se mira como algo solamente desde el aspecto urbanístico o arquitectónico, pero no se mira la ciudad como un sistema vivo”.

5ta temporada del Laboratorio Juvenil de Reflexión y Participación

En total, fueron tres las jornadas que se realizaron durante este 2017, enfocadas en promover la reflexión, conversación y participación de estudiantes de educación media, para que puedan desarrollar una conciencia crítica respecto a su entorno y comprendan que son una pieza fundamental en la creación de su propia sociedad.

“Para el Museo fue muy significativo concluir con esta jornada el Laboratorio Juvenil 2017. Creemos que en esta última sesión se cumplieron todos los objetivos trazados al comienzo del año, ya que efectivamente las y los jóvenes participantes tuvieron un rol activo y presentaron propuestas innovadoras y posibles de gestionar en sus entornos", comentó Natalia González, encargada de Educación del Museo Benjamín Vicuña Mackenna.

El Laboratorio Juvenil benefició durante este año a más de 180 escolares de 6 establecimientos educacionales de la Región Metropolitana, quienes tuvieron la oportunidad de tratar interesantes temas de la mano de expertos: midieron sus huellas de carbono, descubrieron parte de la biodiversidad olvidada en la ciudad y reflexionaron sobre cómo generar cambios en sus respectivos barrios.